¿Llevas demasiado tiempo en Francia ? ¿ cuántas cosas haces hoy que antes no hacías o que nunca pensaste hacer? He aquí una lista con cosas que he vivido en carne propia y que me indican que sí, tanto tiempo en el Hexágono me ha transformado. Y tú ¿en algo te has afrancesado ?

1.- Sales a tomar el sol – como iguana- en cuanto hay.

2.- El «hágalo usted mismo» no te da miedo y eres capaz de echar mano en cosas que nunca pensaste pues no te quedó de otra más que aprender algunos principios básicos de bricolaje, pintura, jardinería y hasta de mecánica.
3.- Al conversar en español usas mucho el ‘normalmente’ y alguna vez dijiste algo como «no me puedo exprimir correctamente» sin reparar en la burrada que pronunciaste. (Exprimer en francés quiere decir expresar).
4.- Eres rey (reina) de los acentos. Hablas inglés con acento francés. Hablas francés con acento mexicano. Pero lo peor de lo peor es cuando ya tienes un raro acento en español que tú no notas pero tu familia y amigos de allá sí.
5.- Mujeres : en México, incluso para ir a las tortillas te arreglabas y te colgabas hasta el molcajete. Ahora casi nunca te maquillas y casi te da igual ir por el pan con el almohadazo en la cara o incluso con «crocs» en los pies.
6.- A falta de tortillas: pan, así que diario compras tu baguette.

7.- En tu refrigerador siempre hay queso. Y de hecho entre más apestoso, más rico te sabe.
8.-Tal vez no aplique si vives en una gran ciudad pero en provincia uno se sienta para comer y lo hace de manera ordenada (entrada, plato, queso y postre). Si no comes queso o postre al final sientes que no has terminado de comer.
9.- Acompañas tu comida con una copita de vino o agua natural. Ya no concibes tomar refresco a la hora de la comida y ni se te ocurre hacer agua fresca de piña (con lo caro de la fruta !)
10.- Si ya sabías cocinar aumentaste tus horizontes culinarios. Si no: seguro aprendiste por puro instinto de supervivencia.

11. Carnívoros : si antes te gustaba la carne bien cocida ahora te sabe mejor cuando le escurre la sangre.
12.- Comes con los codos en la mesa sin complejos de mala educación.
13.- Si alguien te da un regalo, lo abres de inmediato, frente a la persona que te lo obsequió porque sabes que no hacerlo puede ser considerado como falta de cortesía.
14.- Para agradecer un regalo, felicitar a alguien – o mostrarle tu apoyo- ya no abrazas, ahora das dos besos (ó 3 ó 4 según la región en la que vivas).
15.- Invitaste 8 personas a comer y ¿llegan 9 ? Es raro pero si llega a suceder no dirás nada aunque muy en el fondo sí te exasperas sobre todo si no tienes una novena silla, el noveno cubierto, la novena porción de comida… En México se les echa más agua a los frijoles pero aquí es otra historia un poco más complicada.
16.- Ni en sueños se te ocurre ir a cenar a las 10 pm porque sabes que no encontrarás un restaurante que acepte servirte a horas tan tardías.

17.- Tienes en tu congelador algo de Picard y ya no piensas en lo que diría tu mamá al saber que comes -o peor aún: ¡ le das de comer a tus hijos !- comida congelada.
18.- Las quesadillas – de queso gouda- con tortillas de maíz, el guacamole y todo producto o alimento mexicano son UN LUJO.
19.- Regañas a tu mascota con improperios en francés.
20.- Casi nunca traes efectivo. Todo lo pagas con tarjeta bancaria (hasta unos chicles, un café, el pan).

21.- Si no eras bueno en geografía, entonces afinaste algunos de tus conocimientos y hoy sabes perfectamente que existe Francia Metropolitana y también Francia de Ultramar (en francés los DOM TOM, départements et territoires d’outre mer, departamenos y territorios de ultramar). Más o menos los ubicas en un mapa o tal vez hasta ya fuiste a Martinica, Guadalupe, Reunión, Nueva Caledonia, Guyana francesa, Mayotte, Wallis y Futuna, San Pedro y Miquelón, San Martín, San Bartolomé…
22.- Entendiste que aquí todo es con calma : ya sean trámites burocráticos o citas con el doctor así que en la medida de lo posible tratas de anticipar hasta tus enfermedades pues sabes que es ‘normal’ que para una cita con un oftalmólogo particular haya un tiempo de espera promedio de 9 meses.
23.- Tienes un guardarropa oscuro : negro, café, azul marino… Si te vistes de amarillo o de rosa mexicano la verdad es que casi sientes raro eso de llevar una prenda de color tan llamativo.
24.- Si organizas fiesta aplicas los tiempos pues sabes que la comida o cena empieza con el aperitivo y se termina después del digestivo ( y los invitados se van solitos, no hay necesidad de correr a nadie).
25.- Si en México nunca fuiste puntual seguro que ahora sí lo eres.
26.- Cuestión de sentido común, pero en Francia con mayor razón sabes que para todo, siempre hay que soltar la letanía del «Bonjour s’il vous plaît merci au revoir bonne journée et/ou bonne continuation» (buenos días por favor gracias adiós que tenga buen día y/o que le vaya bien) so pena de que tu interlocutor te haga mala cara.
27.- El clima es algo importante en tu vida y consultas el pronóstico del tiempo todos los días.
28.- Respetas las reglas de tránsito al pie de la letra porque sólo tú sabes lo que batallaste para conseguir el permiso de conducir francés.
29.- Sobre todo cuando ya eres mamá (es mi caso), en el supermercado ves el precio de los artículos por kilo y te preocupa el lugar de origen de los alimentos.
30.- Y te acostumbraste a hablar bajito. (En lo personal eso de «no hablar fuerte» me fue muy difícil).
31.- Mejor dar 10 vueltas y encontrar lugar gratuito para estacionarte en la calle antes que pagar estacionamiento (lo haces cuando de verdad no te queda de otra).
32.- Tomas cita hasta para pasar a saludar a tus amigos.
33.- Tomar un café se ha vuelto cosa de 3 minutos. No como antes que durabas toda la tarde sobre todo entre amigas.

34.- Sabes que la compra-venta de cosas usadas no tiene nada que ver con la pobreza sino con la idea de que si ya no me sirve a mí a alguien más sí le servirá. Hasta has comprado o vendido cosas en un vide grenier o brocante (venta de garaje o mercado de pulgas).

35.- Ya ríes con películas como «Les bronzés», «Les bronzés font du ski», «La soupe aux choux», «Le dîner des cons», «Le père noel est une ordure», «Les visiteurs», «La grande vadrouille», «Les trois frères»…
36.- Te sabes al menos el refrán de más de alguna canción de la tanda del ayer (Dalida, Claude François, Johnny Hallyday, Polnareff…) y tal vez hasta la coreografía !
Chin !!! qué complicado es ser francés. Para mí es mejor ser turista en la France jo jo jo. Besos Alexi.
Me gustaLe gusta a 1 persona
pues sí :p ven pronto, yo te espero 🙂
Me gustaMe gusta
Hola Alejandra, y así es – ¡Claro que «cuesta bastante» el ser Cosmopolita!
Piensa también que Francia se ha hecho más «rica» – con la adquisición de tu persona, de lo cual debes enorgullecerte. Te hago llegar mi mejor abrazo – para ti y los que amas.
Adolfo,
Me gustaLe gusta a 1 persona
gracias Adolfo 🙂 abrazo para usted también 🙂
Me gustaMe gusta
Me identifique con varías cosas incluso si no viví años allá en especial lo de los besos, me acuerdo que cuando llegué allá al principio sólo saludaba de un beso y los dejaba con la otra mejilla volando hasta que me acostumbre y cuando regresé a México saludaba con dos besos por un tiempo. Me encantó la entrada, saludos y hasta el próximo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
jijiji dicen que más difícil que adaptarse al país extranjero, es precisamente la adaptación a tu propio país al regreso ! será cierto ?
Me gustaMe gusta
Vivi hace como 5 años en Francia, solo estube medio año, pero hay algunas cosas que sigues teniendo despues de tiempo, 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
Acabo de leer esta entrada de tu blog y aunque no viví tanto tiempo en Francia me identifico casi con todo!! Pasé 4 años con un francés, supongo que es por eso. Estoy a punto de volver al Hexágono y estoy más que feliz por ello!! 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias por leer Natalia. Suerte en tu venida 🙂
Me gustaMe gusta
te encontré por expat-blog y adoré todo lo que has escrito. Amo Francia, lo poco que conozco. Saludos desde Montevideo 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias Vale 😉 comentarios como el tuyo me hacen el día 😉
Me gustaMe gusta
Todo depende de uno, llevo 7 años aqui y no haga absolutamente nada de eso. Claro, no estoy casada con un Francés quizás y sea por eso pero claro, todo mundo sabe que aquí el tiempo es dinero y que la espera de citas ya sean en prefectura o médicos es casi eterna, en Estados Unidos es exactamente igual.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Hola Karina, gracias por tu lectura y comentario 🙂 claro que mucho depende de tu entorno, no sé si vivas en una ciudad grande o en un pueblo pequeño y por supuesto que eso influye digamos en la ‘homogeneización’ con la cultura y la gente de aquí. En lo personal independientemente de mi marido, vivo en una ciudad pequeña donde la cultura latina o mexicana es algo realmente atípico por lo que hacer las cosas como la gente de aquí para mí fue un proceso prácticamente natural. Saludos !
Me gustaMe gusta
Reblogueó esto en Site Title.
Me gustaMe gusta
Me encanta tu blog, soy mexicana igual que tu casada con un francés vivimos en México pero muchas de las cosas ya las he aprendido, pronto iremos a Francia espero no batallar tanto con la adaptación.
Recibe un abrazo con calor mexicano 😊
Me gustaMe gusta
Muchas gracias Gis 🙂 un abrazo y suerte con su venida !
Me gustaMe gusta